Ayer tuvo lugar el II Concurso de las Jornadas Gastronómicas de la Huerta de Conil. En él, he tenido la oportunidad de ser jurado y os voy a contar qué me he encontrado y qué podéis encontrar vosotros si asistís del 5 al 14 de abril. Aquí os dejo más info del evento 👈
El concurso ha estado perfectamente organizado. Por esto mismo, ninguno de las seis personas que compusimos el jurado sabíamos quién estaba detrás de cada elaboración. Sin embargo, yo lo voy a incluir aquí, así podéis cotillear quién ha hecho qué.
El Jurado
En esta ocasión, el concurso de la huerta de Conil se ha dividido en dos clasificaciones. Los platos podían ser innovadores o tradicionales, y cada uno tenía su jurado.
El innovador
- Therese Moller, gerente y chef de Alma Verde.
- José Manuel Vela Rodríguez, chef del Restaurante El Pasaje.
- Leon Griffioen, jefe de cocina y gerente del bar Código de Barra.
El tradicional
- Ambrosio Rubio, que es chef del restaurante del Hotel Antonio, en El Colorado (Conil).
- José Antonio Trujillo Marín, que ha sido chef del Hotel Marbella Club y del Hotel Las Dunas Park entre otros.
- Y yo! 🤓, como profe del I.P. Fernando Quiñones de Cádiz.
Las Elaboraciones tradicionales
Berza con papada ibérica de montanera.
Comenzamos con este plato, que resultó ser la propuesta del restaurante Bar Avenida. Era una Berza tradicional, de buen sabor y buenos productos. Por otra parte, aunque varios productos respondían al criterio de ser de Km0, la presencia de tanta carne impidió que los sabores de la huerta se realzasen como se buscaba en este concurso. Finalmente, aunque la estética del emplatado era el valor de menor importancia en el apartado tradicional ésta fue bastante mejorable.
Gazpacho caliente
Este plato del bar Puerta Cai respondía a una elaboración muy clásica de la huerta de Conil. La temperatura de servicio fue muy agradable, el sabor fue homogéneo, con las pinceladas de potencia que se esperan de esos pimientos y espárragos trigueros. Presentar un plato de este tipo nunca se presta demasiado a una estética agradable, sin embargo, en este caso, de forma sencilla, se consiguió de una forma excepcional.
Tarta de zanahoria, naranja y garbanzos de Conil
La barra de Rosario nos trae este precioso emplatado de este bizcocho con helado, crema y merengue de aquafaba. El sabor era muy agradable, con carácter, aunque quizá un punto dulce de más, podía compensarlo con el punto de sal, que sí era el adecuado. Sin embargo, el hecho de emplear especias como cardamomo y canela, se alejó del requisito del Km0. Además, el helado empleaba Pacojet, que se aleja de las técnicas tradicionales, lo que impidió valorar este apartado con mejor puntuación.
Potaje de judías
Este potaje de judías del bar Juan María, estaba fantástico. El punto de los garbanzos fue el adecuado, muy mantecosos y nada harinosos, con el hollejo no despegado. Las judías verdes permanecían enteras, y con una textura muy agradable. El único «pero» que se le sacaría es que el aroma a hierbabuena prevalecía en exceso. Aún así, excelente.
Arroz con habas, chícharos y alcauciles
El Hotel Restaurante Blanco y Verde nos propone este guiso que acompañaba, como se hacía tradicionalmente, con una ensalada de lechuga y cebolleta. Esta mezcla es típica de esta época, y se trata de comer una cucharada del guiso, seguida de otra (con la misma cuchara) de la ensalada. El sabor y textura del plato fue muy equilibrado y tanto las verduras como el arroz estaban en su punto. Además, la presentación, aunque sigue siendo una elaboración que no se presta, está conseguida.
Cazuela de tagarninas esparragadas, jamón y huevos escalfados
Restaurante El Buche nos sorprende con esta propuesta donde encontramos un guiso clásico revisionado. El escalfado del huevo, como se ve en la foto, se hizo con la técnica de Arzak, que consigue esa forma en flor. Las tostas que lo acompañaban tenían un toque picante a jengibre fresco que le aportaba un punto más sorprendente aún. Siendo una buena interpretación del clásico guiso, no se adecuaba a algunos aspectos a valorar en la propuesta tradicional, como ya he comentado en otras elaboraciones.
Lasaña de la huerta sobre prado de Moringa
Esta presentación en losa de una clásica lasaña vegetal hizo que el restaurante Malabata nos trajera todos los sabores de la huerta de Conil en una sola elaboración. desde el relleno vegetal a ese «prado» de la Moringa, todo era Km 0. Aunque la temperatura de servicio fue algo insuficiente y desigual, el sabor era intenso y muy equilibrado.
Cocido de coles con tagarninas
Con este plato de Feduchy Foodie’s Corner , terminamos el concurso. La elaboración tenía un sabor potente y profundo, aunque quizá, lo que más sorprendía era la textura del chorizo y la morcilla, que lograban mantener una firmeza que se agradecía. Los garbanzos estaban en su punto y las tagarninas también. Sin embargo, estas últimas quedaban claramente en segundo plano por la presencia de las carnes del guiso, exquisito por otra parte.
Los ganadores
Gracias al buen nivel que ha habido, las clasificaciones han estado bastante reñidas, quitando el primer puesto que despuntó, en el resto hubo bastante equilibrio.
Lo cierto es que participar como jurado en este II Concurso de las Jornadas Gastronómicas de la Huerta de Conil (mira que es largo el nombrecito…) ha sido un auténtico placer, donde el auténtico ganador será todo aquel que asista y pruebe todos estos productos que tan cerca tenemos y que no siempre se valoran como deberían.
El innovador
- Primer premio: Manuel Jesús Sánchez Ramírez, por sus Habas escabechadas con espuma de alcauciles y polvo de chícharos (Séptimo Arte Gastrobar).
- Segundo premio: Raquel Almazo Amaya, por su paté de alcauciles (Venta El Andaluz).
- Tercer premio: Antonio García Muñoz, por su Alcaucil de Conil, crema, tallo, hojas crujientes y corazón confitado (Restobar La Almazara).
El tradicional
- Primer premio: Cristóbal De Alba Sánchez, por su Gazpacho caliente (Bar Puerta Cai).
- Segundo premio: Antonia Moreno Ramírez, por su Arroz con habas, chícharos y alcauciles. (Hotel Restaurante Blanco y Verde).
- Tercer premio: Francisco Pérez Calero, por su Lasaña de la huerta sobre prado de moringa. (Restaurante Malabata).
Si se te ha hecho la boca agua, no lo pienses más, échale un vistazo a esta página y entérate de todo sobre las jornadas. Y si andas tan perdido que no sabes distinguir entre puerro y apio… échale un ojo a esta otra página! antes de acercarte por la huerta de Conil! 😅😅
Muy bueno el artículo Guille, muy ilustrativo. Te lo agradecemos, ahora tenemos más información de lo que se cuece en la Ruta de La Huerta de Conil». Las fotos increibles!!!!